Oración por las Misiones en Pamplona: la Iglesia en salida al servicio del mundo

Ayer, lunes 10 de noviembre de 2025, tuvo lugar en la Iglesia de San Francisco Javier de Pamplona la Oración por las Misiones, un encuentro mensual que se celebra cada segundo lunes de mes. La cita reunió a fieles comprometidos con la misión evangelizadora de la Iglesia, en un clima de recogimiento y comunión.

El acto comenzó con la exposición del Santísimo Sacramento, momento central de esta oración misionera. Ante la presencia eucarística de Cristo, los participantes dedicaron un tiempo de silencio y adoración, con una reflexión sobre “la misión de la Iglesia a la luz del pensamiento de los papas Francisco y León XIV”, tema que inspiró un diálogo interior sobre la naturaleza y los desafíos actuales de la evangelización según algunos participantes.

Durante la meditación, se destacó cómo el Papa Francisco ha insistido a lo largo de su pontificado en la necesidad de una Iglesia “en salida”, cercana a los pobres y abierta al diálogo con el mundo. Su invitación a “salir a las periferias” fue recordada como un llamado permanente a los cristianos a no encerrarse en estructuras, sino a anunciar el Evangelio con alegría y coherencia. Por otro lado, se hizo referencia al magisterio del actual Papa León XIV, quien ha continuado esta línea pastoral poniendo especial énfasis en la dimensión cultural y espiritual de la misión, subrayando que evangelizar no es imponer, sino proponer con respeto la verdad que libera y da sentido a la vida. Haciendo una mención especial a la opción preferencial por los pobres desde la Exhortación Apostólica “Dilexi te”.  

El encuentro sirvió también para estar comunión con los misioneros españoles que actualmente sirven en los cinco continentes. De ellos, 428 son misioneros navarros que desarrollan su labor en 57 países de África, América, Europa y Asia. Cada uno representa un testimonio vivo de entrega, generosidad y fe, llevando la luz del Evangelio a contextos muy diversos: desde comunidades rurales en África hasta centros educativos en América Latina o parroquias en zonas desfavorecidas de Europa y Asia.

La oración estuvo acompañada de cantos sencillos y momentos de silencio, para profundizar en la Misión de la Iglesia universal como tarea propia de todo bautizado.

La Iglesia de San Francisco Javier, patrono de las misiones y uno de los grandes referentes del espíritu evangelizador, se convirtió una vez más en un espacio de encuentro entre lo local y lo universal. La celebración recordó que la misión no es solo tarea de unos pocos, sino una llamada para todo bautizado, una invitación constante a ser testigos de la fe con obras y palabras.

Así, la oración de este mes se convirtió en un signo visible de esperanza y compromiso. En medio de un mundo marcado por la incertidumbre y la desigualdad, los participantes salieron con la convicción de que la misión de la Iglesia sigue viva y fecunda, sostenida por la oración, la acción del Espíritu Santo, la fraternidad y el deseo de construir un mundo más justo y fraterno, iluminado por el amor de Cristo.